jueves, 29 de diciembre de 2016
No hay causa, pero si espada que sangra en las manos. El sueño se enrolla en las raíces como un proscrito que emergerá a la nada al amanecer. El reloj es la puerta de arena, el bajo del coche trasero, que bajo su blando paso alumbrará un caballo en la despedida. Y cuando te des cuenta, la salvación y la herida serán la misma cosa.
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1 comentario:
Sueño, raíces y profundidad en una misma frase...
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