lunes, 24 de noviembre de 2008

Códigos de barras


Sonrisas solidarias que llenan huecos indescifrables. La lectura intransigente de los códigos de barras. El despertar de las horas en la falsa matemática de la perspectiva isométrica. Y cuando miramos con cierto ojo crítico hacía lo cotidiano, descubrimos que hay cierto resplandor en cada una de las piezas del baño. Encendemos la luz, y concentramos nuestra mirada fija en el vacío. Y nos damos cuenta de que todo es apariencia. Los tabiques de pladur son los límites puros del territorio inexplorado de nuestros ojos y sus percepciones distorsionadas. Luego están los diferentes colores, que simulan ventanas del alma, a las que nos asomamos cada mañana buscando el punto exacto de corte de la tierra con el cielo. Como si quisiéramos abrazar la fe con una simple coordenada, un ángulo, o una formula matemática.

5 comentarios:

Eme (Nada que ver con eme dj)) dijo...

"Luego están los diferentes colores, que simulan ventanas del alma", bonita metáfora. ¿Has pensado escribir un libro? Yo lo compraría.

MBI dijo...

Las barras de la ventana la codifican como ESTUPENDA entrada

Dante dijo...

Los sentidos que son limitados, no llegan a ahondar en la magia matemática y el sonido de los astros. La profundidad de otra dimensión que está fundida en nuestro cuerpo.
Has hecho una bella descripción con un magnífico fotodibujoapariencia.

leo dijo...

ufff la verdad nos ponemos a observar todo lo que hemos creado y lo que esta creado sin saber bien por qué motivo... y a mi me hecha humo mi cabeza, lo que si esta claro es qeu todo, todo es una jodida apareciencia¡¡

"bucando el punto exacto de corte de la tierra con el cielo" ufff yo siempre miro a lo lejos justo la linea que se crea entre el cielo y la tierra y lo mejor es que si llegará alli andando, siempre habrá otra linea a lo lejos...siempre seguimos con nuestra fe, sea una apariencia o no, somos asi de raros.

me ha gustado tu entrada, me ha echo reflexionar y darme cuenta de muchas cosillas, jaja

un besazooo...

leo

Tumulario dijo...

"Sonrisas solidarias que llenan huecos indescifrables...Como si quisiéramos abrazar la fe con una simple coordenada, un ángulo, o una formula matemática".
Empezar en lo inconsistente para acabar en lo imposible.